Traducción, Ana Azanza
"A los hombres les divierte escenificar la humillación"
Vincenzo Capodici
Die Welt: Crisis de Europa,
Guerras, caos de los refugiados, racismo, terror, ataques sexuales. El mundo se
deshace y Ud exige una nueva lucha de clases. Nos debe una explicación.
Slavoj Žižek: No me refiero a
estúpidas y pasadas de moda ideas de la izquierda, no me refiero al
comunismo. Si queremos hacernos cargo de los problemas actuales, necesitamos
solidaridad con los explotados y oprimidos de este mundo. Sobre todo hemos de
cambiar las reglas de juego en las relaciones económicas internacionales y
terminar con los juegos geopolíticos en las regiones que están en crisis que
son la base y fundamento del terror y del exilio. En las sociedades modernas
vivimos bajo una especie de cúpula de cuyo bienestar social se ven excluidos la
mayoría de los seres humanos. En Europa estamos viviendo la afluencia de los
refugiados de la guerra y de los migrantes de los países pobres y arruinados. Esos
hombres y mujeres intentan alcanzar el bienestar que se disfruta bajo nuestra
cúpula. Los refugiados son el precio del capitalismo global, cuya dinámica desatada
destruye la vida y los espacios culturales y sustituye a los estados. El exilio
de esas personas, como el terror, es un síntoma de la nueva lucha de clases.
¿No ver?, ¿no oír?, ¿no hablar?, Slavoj Zizek no calla | Foto Mat Carr |
Die
Welt: ¿Cómo explica Ud los ataques de inmigrantes a mujeres en Colonia
y en otras ciudades alemanas?
Slavoj
Žižek: Entre los refugiados que vienen de países árabes hay muchos
jóvenes totalmente desorientados. Se ven pillados en una situación de envidia y
odio. Un odio que no es más que la expresión del frustrado anhelo de una vida
cómoda en Occidente. Las brutalidades contra los débiles, en este caso las
mujeres constituyen una conocida conducta de los desamparados: quieren perturbar
el orden social y herir el sentimiento general de bienestar. Los
acontecimientos de Colonia recuerdan al carnaval cuando se infringen muchas
reglas de la convivencia. En ese sentido la noche de Año Nuevo fue un obsceno
carnaval de desvalidos.
Die
Welt: ¿Qué papel tuvo el motivo sexual en esos ataques?
Slavoj
Žižek: No se trata simplemente de la satisfacción sexual de hombres
jóvenes hambrientos. Eso lo podrían haber satisfecho de otra manera, a
escondidas, fuera de la luz pública. Esos hombres se divirtieron escenificando
un gran espectáculo de horror y humillación, en el que las mujeres de la
privilegiada Alemania se vieron arrastradas a una situación de doloroso
desvalimiento a las que molestaron y de las que abusaron. Esa carnavalesca
rebelión de los desamparados no tiene
nada de satisfactorio ni de emancipatorio. Es criminal e inaceptable.
Foto Ulf Andersen, Slavoj Zizek, uno de los intelectuales más valorados internacionalmente |
Die
Welt: Con los refugiados llegan muchos hombres que no son integrables
y que causan problemas. ¿Cómo puede Europa gestionar este asunto?
Slavoj
Žižek: Nuestra tarea es dejar claro a esas personas que no vamos a
tolerar una conducta de odio ni agresiones que busquen venganza. No tenemos que
explicárselo porque saben muy bien lo que han hecho, han herido voluntariamente
nuestra sensibilidad. Quien no respete nuestros valores no tiene nada que
buscar entre nosotros. “La corrección política“ o el afán de querer comprender
característico de la izquierda no debe conducirnos a admitir que se vulneren
los derechos de las mujeres y su integridad.
Die
Welt: Hablemos de la crisis de los refugiados. Europa parece enfrentarse
a una exigencia exagerada. ¿Cómo juzga Ud. la política europea con respecto a
los refugiados?
Slavoj Žižek: Europa puede y
debe hacer más. No se trata de abrir las fronteras como dicen muchos en la
izquierda por un sentimiento de culpa. La empatía no basta. Hemos de ocuparnos
de que el flujo de refugiados llegue por rutas controladas. Algo así como los
centros de acogida en los países vecinos de Siria, también en Libia. Europa
tendría que utilizar a los militares para ello, como en las catástrofes
naturales. En los centros de acogida se ha de decidir qué refugiados pueden
seguir el viaje y adónde. Lo peor son las situaciones caóticas, como las que
hemos visto el año pasado. La mayoría de los refugiados no son una amenaza para
Europa. Pero el caos de los refugiados sí lo es.
Die Welt: ¿Qué amenazas ve Ud. para Europa?
Slavoj Žižek: El peligro mayor
está en la radicalización de los propios europeos que está en marcha desde hace
tiempo. En Francia tenemos el Front National, Pegida y AfD en Alemania. También
en otros países crecen las tendencias de extrema derecha y los populismos de derechas.
La izquierda radical se aprovecha del caos de los refugiados. En caso de que Le
Pen y compañía lleguen al poder, Europa ya no será como la hemos conocido y como
queremos que sea.
Die Welt: ¿A qué Europa se
refiere?
Slavoj Žižek: A la Europa del universalismo de
la Ilustración,
de los derechos del hombre y de los derechos humanos, de la solidaridad, de la
economía social y del estado social. Europa tiene que estar orgullosa de sus
logros y tiene que defenderlos con decisión. Europa tiene que exigir a los
musulmanes que llegan que respeten esos valores europeos. Los derechos de las
mujeres por ejemplo no están a disposición. Y tenemos el derecho y el deber de
establecer fronteras al islamismo.
Die Welt: Habla Ud de la defensa
de una cultura Europea. ¿Cómo se relaciona esa posición con su crítica radical
al capitalismo?
Slavoj Žižek: El modelo europeo
está amenazado por dos tipos de capitalismo, ambos son antidemocráticos. Por
una parte tenemos el radicalismo fundamental del mercado de procedencia
norteamericana, por otra el capitalismo asiático-autoritario, como se practica
sobre todo en China. Europa tiene que defender con fuerza sus valores. El capitalismo
de Europa incluye la unión de las libertades individuales y el Estado social. Europa
tiene algo que ofrecer al mundo. Nunca fue Europa tan importante como hoy. En
caso contrario un escenario de horror amenaza al mundo, que Hollywood ha
representado de modo divertido en películas como "The Hunger Games" o
"Elysium". En "Elysium" por ejemplo hay un pequeño grupo de
superricos y privilegiados mientras el resto de la humanidad se va a pique.
Die Welt: ¿No es demasiado simplificar atribuir toda la
responsabilidad del mal al capitalismo como hace Ud.?
Slavoj Žižek: No quiero hablar
mal del capitalismo por principio. Pero
el capitalismo global es cada vez más antidemocrático, no reconoce los
estándares sociales y sigue una lógica valorativa inhumana. El Congo es el
perfecto ejemplo de lo que digo. Es un país integrado en el capitalismo global
pero se puede decir que es el país más violento y que no tiene un Estado que
funcione. En el Congo los señores de la guerra hacen negocios muy lucrativos
con empresas occidentales, hay explotación, miseria y niños soldado. El capitalismo
global no puede garantizar sus promesas de libertad. El llamado tratado de
libre comercio TTIP no concierne sólo a las empresas. Pero el comercio injusto
no es la única causa de la miseria, la anarquía y la guerra, también lo es la
intervención militar occidental en los países en crisis.
Die Welt: Por tanto critica Ud
la intervención militar de la coalición liderada por Estados Unidos en la
guerra contra el Estado Islámico (IS). ¿Cuál
sería la alternativa para vencer al califato?
Slavoj Žižek: No es nada
original decir que no existiría el Estado islámico si los americanos no
hubieran intervenido militarmente en Irak. Supuestamente lo tiene que saber el
ex presidente responsable de la intervención George W. Bush. Los bombardeos no
han traído nada bueno, más bien al contrario. También lo hemos visto en la
intervención occidental en Libia. Y lo mismo vale hoy para Siria. Habría que
ejercer presión sobre Turquía y Arabia Saudí. Si esos dos países, que juegan un
doble juego, dejaran de apoyar al IS, el califato caería en tres o cuatro meses.
En la llamada guerra contra el terror se libran otras batallas. Las grandes
potencias y las potencias regionales persiguen sobre todo sus propios intereses
geopolíticos.
Die Welt: ¿En qué medida es la
guerra de Siria un conflicto de las religiones respecto de las culturas?
Slavoj Žižek: Parecería que así
son las cosas porque en este conflicto intervienen los poderes occidentales y
Rusia. Pero en la guerra de Siria tenemos en primera línea un choque dentro de una
cultura, una cultura islámica. La mayoría de las víctimas del estado islámico
son musulmanes. El estado islámico mata a sunitas moderados y sobre todo a los chiítas.
Para el estado islámico Irán es su mayor enemigo al mismo nivel que Occidente.
Die Welt: ¿Cómo interpreta Ud
los ataques terroristas de París?
Slavoj Žižek: El mensaje de
este terror del ES no era precisamente aterrorizar a Europa, saben
perfectamente que Europa reaccionará a los ataques. Más bien se trata de abrir
un cortafuegos en las sociedades europeas. Los terroristas tienen el objetivo
de fomentar en Occidente las tendencias islamófobas, con la esperanza de que la
islamofobia creciente sirva para radicalizar y militarizar a los musulmanes
europeos. El estado islámico quiere arrastrar a su lado a los musulmanes. A los
musulmanes moderados que se sienten a gusto en Occidente no les llama nada el
estado islámico.
Die Welt: Las causas del terror
y también de la huida de los refugiados están según Ud en el capitalismo
global. ¿Qué debería hacerse? ¿A quién exige Ud que actúe?
Slavoj Žižek: Los estados cada
uno por su lado no pueden hacer nada de provecho. Hace falta una reacción de
acuerdo en la sociedad internacional, como la que ocurrió a raíz de los
atentados de París. Tengo mis dudas de que efectivamente se haya producido ese
acuerdo. Fundamentalmente los estados occidentales y los demás estados líderes tienen que emplearse
a fondo en atacar las causas económicas del terror y de la salida de
refugiados. La causa principal de la emigración está en el capitalismo global y
sus juegos geopolíticos. La crisis de los refugiados no afecta sólo a Europa,
en el mundo entero hay 60 millones de personas refugiadas. Es urgentemente necesario
un capitalismo humano. Está mal decir esto, pero quizás necesitamos una gran
crisis de refugiados, guerras y más terror para despertar de una vez.
Die Welt: Es Ud muy, muy
pesimista.
Slavoj Žižek: A corto plazo soy
pesimista, sí. No veo ningún político que trabaje seriamente en buscar
soluciones duraderas. Tampoco veo gobiernos
que estén dispuestos a impulsar una solidaridad global con los desheredados y
desposeídos, los explotados del capitalismo. Para Europa los peligros son
reales. Existe la amenaza de la desaparición del proyecto europeo de la
emancipación democrática. No digo que se haya perdido todo. Pero si no hacemos
nada, estamos perdidos de verdad.
Die Welt: ¿Cómo puede Europa
despertar como dice Ud?
Slavoj Žižek: No lo sé. Sólo sé
que la crisis política en Europa no es más que una reproducción de las crisis. Lo
vimos en el caso de Grecia. Todos saben que Grecia jamás podrá devolver sus
deudas. Sin embargo no hemos cambiado las reglas del juego, sino que nos hemos
limitado a producir nuevas ilusiones. En 3 ó 4 años tendremos nuevamente una
gran crisis griega.
<>
ResponderEliminarNo, no existe ese proyecto. Nos hemos unido para sobrevivir en la absoluta previsión de un mundo que será más que injusto.
Marjane Satrapi, Persépolis, cine de animación. ¿la has visto? otra que no se enteraba de nada, al principio. Por suerte, al menos, somos personas libres de vivir en una teocracia.